Primero dices que es una mierda del montón y ahora que sobrevive a las medianías...
Precisamente eso es lo excelente de la película, el cambio de rumbo, la farsa en la que desemboca, el engañar al espectador. Cuando visualizas el argumento imaginas casquería, violencia sin límites y altas dosis de horror en forma de asco, pero te esquiva, te engaña, te burla y dribla a todo lo que esperabas en un principio. Deja al espectador como un mero idiota, como un pelele que sigue viendo la película en busca del ansiado momento de repugnancia extrema... Un momento que nunca llega. Por eso no te gusta, porque te debiste sentir subnormal al tragarte hora y media de lo que pudo ser y no fue. Que una película te sorprenda hoy día no es fácil, así que sólo por ello ya merece todo mi respeto.